La teoría de las inteligencias múltiples sostiene que no hay una sola inteligencia, estable e invariable, como hace años se venía considerando; sino que hay una diversidad de inteligencias que poseemos todos los seres humanos, y que por lo tanto, inevitablemente, tendremos destrezas en alguna o algunas de ellas.  Ofrece una visión positiva para el niño y múltiples beneficios, tanto a nivel escolar, personal como social.Los principales beneficios de las inteligencias múltiples

1. Permite al alumno valorarse a sí mismo por cómo es y cómo aprende, entendiendo su individualidad como algo positivo y único.
2. Anima a los niños a entender y reflexionar sobre sus debilidades y fortalezas, sin verlas como algo negativo, sino como aspectos que hay que reforzar para mejorar, así como puntos fuertes en los que se puede sobresalir notablemente.
3. Evita las comparaciones con los demás, un recurso muy habitual que suele tener consecuencias negativas a en la autoestima y autoconcepto.
4. Fortalece la autoestima y brinda un enfoque optimista, porque ofrece la idea de que si en algún momento se tienen dificultades y se considera que no se pueden afrontar los aprendizajes, éstos pueden superarse con la atención y metodología adecuada.
5. La motivación y el afán de superación son claves en las inteligencias múltiples, ya que la visión del ser inteligente abarca tal diversidad, que refuerza la autoestima del niño de tal manera que le invita a esforzarse, viendo en ello, la posibilidad de conseguir sus objetivos.

¡Puedo conseguirlo!

¿Qué se puede decir de un niño que tiene la certeza que de una manera u otra podrá conseguir sus objetivos y superar sus barreras educativas? Que es un niño optimista, con una elevada autoestima y seguro de sí mismo, ¿verdad?

Este es el camino que siguen las inteligencias múltiples y por el que tiene tal importancia; porque promueve un estado emocional estable, seguro y confiado de uno mismo. Los obstáculos pueden saltarse y las dificultades pueden superarse, con esfuerzo y valentía, porque todos somos inteligentes, aunque sea de diferente modo.

Esto se consigue, conociendo qué inteligencias prevalecen en cada uno y distinguiendo cuál es la forma más adecuada para asimilar los aprendizajes. Si un niño con inteligencia lingüística, tendrá mucha más facilidad en aprender los contenidos de las asignaturas si se transmiten de forma escrita y verbal. Éste será un punto fuerte en el que deberá apoyarse para los aprendizajes en los que tenga más dificultades. Por lo tanto, su metodología más adecuada, será en la que conlleve el desarrollo del lenguaje.

Sin duda, por sus múltiples beneficios, se podría concluir que es un concepto que podría ponerse en práctica en todas las aulas escolares.

Para más información, hecha un vistazo al libro El descubrimiento de las inteligencias múltiples, donde los niños se empaparán de esta visión optimista de sus inteligencias y se les invitará a descubrirse a ellos mismos. Mediante un cuento ilustrado aprenderán a conocerse a ellos mismos y valorarse. Además incluye una parte para padres y profesores.