Desde hace algunos años, el papel del juego ha quedado relegado a un segundo plano en la vida de los niños. En ocasiones, se considera algo complementario, que únicamente tiene espacio cuando el resto de actividades académicas y extraescolares acaban. Además, profesionales como el psicólogo Peter Gray, sostienen que los niños cuentan cada vez con menos espacio para jugar ‘por su cuenta’ (más allá de indicaciones y supervisión adulta), relacionando el aumento de los trastornos mentales entre los más pequeños con la degradación de su libertad (más información en este artículo).

Estos autores abogan por volver a poner el juego en el centro de la infancia. Defienden un juego social, libre, físico, en contacto con la naturaleza, de descubrimiento del entorno, espontáneo. En el que las reglas las creen ellos mismos, para que puedan equivocarse, y aprendan de ello. El juego les permitirá entrar en contacto con sus iguales, lo que les ayudará a ir conociendo las normas sociales; además de a las personas que les rodean y, en consecuencia, a sí mismos.

Beneficios del juego: un listado inacabable

Como hemos visto, el juego es vital e indispensable para el desarrollo humano, contribuyendo de un modo muy positivo a todos los aspectos del crecimiento del individuo. Por si aún te quedan dudas, a continuación te enumeramos algunas de sus ventajas:

• Motiva intrínsecamente a los alumnos por la asignatura o el objeto de aprendizaje. Ayuda a adquirir y fijar conocimientos.
• Permite aprender de manera divertida, mientras se divierten.
• Desarrolla aptitudes como la atención, la iniciativa, la creatividad o la autonomía.
• Propicia la construcción del conocimiento, permitiendo que los más pequeños establezcan conexiones entre conceptos y generen sus propias ideas.
• Es apto para todas las edades. Siempre es un buen momento para aprender algo nuevo mientras te lo pasas bien.
• Transmite valores de una forma práctica, permitiendo que el niño los haga suyos más facilmente. Para ello, es importante seleccionar correctamente los actividades a las que se jugará, siendo recomendables los juegos cooperativos o que se basen en el respeto al otro.

¿Jugar? ¡A cualquier hora y en cualquier sitio!

El frío o la lluvia a veces nos deja sin ideas y acabamos dejando a los más pequeños delante de una pantalla para pasar la tarde. Te proponemos un listado con recursos que pueden inspirarles con actividades que podrán realizar tanto en exteriores como dentro del aula o en casa. ¡Ya no hay excusas para que la diversión se detenga!

1. Jugar a descubrir emociones: Actividad para jugar a analizar la conducta de una persona a través de sus emociones. Apto para niños y mayores.
2. Dinámicas para interiores: En este enlace encontrarás algunas actividades que se pueden realizar en cualquier momento, para jugar en la escuela y en casa.
3. ¿Te has quedado sin ideas en los días lluviosos?: Un listado de actividades para los días de lluvia o para cuándo quieras proponerles juegos educativos y amenos para realizar en casa.
4. Juegos de interior para realizar en un aula: Las condiciones climáticas adversas ya no serán un problema en las aulas. Actividades fáciles de realizar, divertidos y educativos para realizar en el aula o en espacios cerrados.
5. Actividades para el invierno: ¡El frío ya no es un impedimento para divertirse y disfrutar en casa! Este enlace contiene algunos consejos y propuestas de juegos interactivos, divertidos y fáciles de realizar.

¿Crees que es necesario dar más importancia al juego en la actualidad? ¡Comparte con nosotros tu opinión!